miércoles, noviembre 05, 2008

Longtemps qu'on ne ce vois pas...

Me miras en fotos viejas de momentos felices y te sientes tan ajena, distante a ésa en el papel o en la pantalla. Reviviendo aquello por lo que reímos y envidiando mi sonrisa que también era tuya.

¿Dónde estabas? ¿o es que acaso no me has escuchado llamarte por mi nombre? ¿qué sientes? ¿qué sueñas? ¿qué te duele además del corazón? te he dicho que ya no aguanta más remiendos ni parches improvisados, y el salitre de tus lágrimas lo ha gastado al punto de causarle goteras por donde temo se nos vaya la vida desangradas.

Ya deja eso, ¿no ves que te lastimas? ya... por favor ¡ya basta! ve a dónde nos has llevado, al borde, al extremo, al punto de la locura, al desastre, al caos... justo donde empezamos.

Y ahora buscamos un poco de cordura, la buscamos como se busca en el fondo de un cajón algo que creíamos perdido y sabemos que siempre ha estado en su lugar.

Y pensamos en alas tatuadas en la espalda... y nos tatuamos pensamientos en el alma, ignorando que ésos son los que no se olvidan jamás y que, o nos hunden o nos salvan.

Lo segundo vida, lo segundo será.